Por qué y cómo mantener sus pastos?
Se aconseja pasar con el aireador a principios de temporada así como poco tiempo después del fin del pastoreo. Un rastrillaje liviano y poco profundo, con el único objetivo de repartir los excrementos, se queda una práctica muy rentable. Un tiempo lluvioso y húmedo favorecerá el impacto del pasaje de la máquina. El rocío de la tarde será ideal para los periodos de tiempo seco.
Cuidado: en verano, el pasaje del aireador puede retardar el brote si el trabajo es muy agresivo. Es mejor aplazar esta operación en caso de sequía prolongada, o ajustar la máquina a una presión mínima. En cambio, si se espera un periodo de lluvia próximo, se puede sin problema pasar el aireador; preparará el suelo para beneficiarse de la lluvia.
Segar los residuos de hierba mayores antes de airear, sino se adhieren al excremento e impiden separarse y extenderse; de ahí el interés de combinar el aireador y el cortacésped JOSKIN.
Antes y después del invierno, se trabaja con intensidad las praderas con todo el peso de la máquina y sobre todo con los dientes para airear el suelo y arrancar las hierbas muertas.
La conservación de buenas gramíneas pasa por un mantenimiento regular de la hierba. El pasaje de un aireador y de un cortacésped impide que la flora pobre se propage en todas las praderas cercanas.