JOSKIN equipa sus vehículos con frenos de neumáticos de doble circuito (mangueras rojas y amarillas), de serie. Este conjunto incluye una alimentación de aire comprimido, así como un regulador de freno con 3 posiciones (cargado, semicargado y vacío). Antes de mover la máquina, el conductor selecciona manualmente la intensidad de frenado deseada en función de la carga transportada. Como opción, es posible elegir un regulador automático que toma la información sobre el grado de carga y adapta la potencia de frenado. También es posible equipar este tipo de frenos con los accesorios necesarios para cumplir la norma UE 167/2013, comúnmente conocida como «Mother Regulation». Aunque cada vez menos demandado, ya que se instala principalmente en máquinas arrastradas por tractores antiguos, en los vehículos JOSKIN también se puede instalar un frenado neumático simple circuito (manguera negra) en lugar de la versión de doble circuito.

Como opción, sólo los vehículos JOSKIN simple eje pueden estar equipados con un sistema de frenado llamado «retroceso automático». Similar a lo que se encuentra en los remolques de coches, inicia el frenado cuando su vehículo tiende a empujar el tractor. A continuación, activa un movimiento de desaceleración hasta que la máquina vuelve a ser arrastrada por el tractor. Se dice que el sistema es «inteligente»: está equipado con un mecanismo que reconoce la conducción marcha atrás y, por tanto, no frena en estas condiciones. La opción de retroceso automático sólo está disponible en enganche alto y es ideal para los tractores que no disponen de conexiones de freno para el vehículo remolcado, como sus predecesores, y que circulan a baja velocidad (nota: este sistema no está homologado en todos los países).